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Sigue sin salir el sol para Checo Pérez. El piloto mexicano aún tiene como losa el fallido Gran Premio de Mónaco donde se estrelló. En Barcelona volvió al cuarto puesto. En Canadá terminó en sexto lugar. La clasificación ha sido complicada para un mexicano que parece perder el control de Red Bull. La gestión de su ingeniero también ha lastrado la actuación del piloto que necesita volver a la cabeza del pelotón.
En Canadá, la lluvia y la pista mojada no favorecieron a Red Bull. Durante todo el fin de semana hubo problemas para marcar los mejores tiempos. Ya en la clasificación del sábado, Verstappen marcó su mejor vuelta para mantener el liderato, pero a Checo Pérez le costó adaptarse. Tuvo que combinar los neumáticos intermedios y más blandos para hacer el tiempo ideal. Una confusión de su operador, Hugh Bird, le privó de hacer el corte de la Q2. Un mal sábado se traduce en un torturado domingo.
Pérez aún tenía que escalar lugares, pero en el circuito de Montreal no fue tarea fácil. Ascendió tras el declive de Hulkenberg, Russell y los McLaren de Piastri y Norris. No fue su mejor carrera, que ganó Verstappen, seguido de Fernando Alonso y Lewis Hamilton. A pesar de tener neumáticos más rápidos, el piloto tapatío se ha estancado por detrás de Carlos Sainz. La única alegría para el mexicano fue la vuelta más rápida de toda la carrera.
Pérez ha tenido una caída en el rendimiento desde Monte Carlo. El mexicano ya había tenido un momento irregular en la temporada con Red Bull. En su año de debut, en 2021, corrió siete carreras en las que estuvo en la sombra: sexto en Austria, decimosexto en Reino Unido, todoterreno en Hungría, decimonoveno en Bélgica, octavo en Holanda, quinto en Italia y noveno En Rusia. Al mexicano le costó salir del bache en su debut, pero cuando lo hizo sumó un triplete de podios en Turquía, Estados Unidos y México.
Y es la confianza lo que no puede fallar a un piloto de Fórmula 1. Menos en el equipo de bebida energética que ya ha mostrado su fría decisión con sus pilotos. En 2020 contaron con Verstappen y Pierre Gasly a bordo. El francés no se sentía cómodo, se cayó en Azerbaiyán y tuvo carreras muy irregulares. Sin podio. A mitad de temporada, los jefes del equipo lo enviaron al equipo suplente, Toro Rosso, y se hicieron cargo de Alex Albon, quien corrió una suerte similar. Pese a que ambos eran proyectos para el futuro de su academia, prefirieron buscar una alternativa a la experiencia con Pérez.
A pesar de las últimas tres carreras irregulares, el tapatío sigue sumando puntos. La lucha por el campeonato ya está lejana, pero todavía tiene que pelear por la segunda plaza y no darle una oportunidad a Fernando Alonso, Hamilton o Russell. El consuelo es que Red Bull sigue imparable en el campeonato de pilotos.
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