La Guardia Costera griega ha informado este miércoles de que al menos 79 migrantes fueron encontrados sin vida en el mar Jónico tras el hundimiento de un pesquero en el que viajaban, en lo que podría ser una de las mayores tragedias en las rutas migratorias de alta mar en tiempos reciente. Unos 106 migrantes fueron encontrados con vida y en su rescate participó el yate de una de las familias más ricas de México: los Reina Maya IV.
La prensa griega ha confirmado que el yate estaba en alta mar: había zarpado del puerto de Nápoles el 7 de junio, según el sitio web de tráfico marítimo. navefinder.com— en el momento en que la llamada de socorro alertó a los navegantes en el mar Jónico. La Guardia Costera griega ha confirmado en un comunicado que al menos tres embarcaciones que se encontraban en la zona asistieron en la misión de rescate de los migrantes. “Los rescatados fueron recogidos por la tripulación del yate Mayan Queen IV, que navegaba cerca del lugar de la tragedia”, informa el diario digital. Dikaiologitika. Imágenes capturadas por Reuters Muestran a decenas de migrantes bajando del yate tras el rescate en el puerto de Kalamata.
Él reina mayaatracado en Grecia desde hace varios años, es propiedad de la familia Baillères, según la página de información especializada SuperYachtFan.com, que recopila información verificada. Es una embarcación de lujo que fue construida en 2008, navega bajo bandera de las Islas Caimán y tiene 93 metros de eslora. Dueños de la cuarta fortuna más grande de México según listado de la revista Forbes publicado el año pasado, los Baillères son dueños del Grupo Bal, un conglomerado de siete empresas que van desde la minería hasta los grandes almacenes. El icónico Palacio de Hierro, inaugurado en 1891, es símbolo de las tres generaciones que han tomado las riendas de los negocios en el país.
Alberto Baillères convirtió la empresa minera de su padre, fundada en 1887, en una potencia minera mundial, hoy llamada Industrias Peñoles. Peñoles es actualmente uno de los dos mayores productores de plata del mundo a través de su subsidiaria Fresnillo, que opera una de las minas más ricas del estado de Zacatecas. En el momento de su muerte en febrero del año pasado, su fortuna ascendía a 8.480 millones de dólares (7.380 millones de euros), según el índice global de millonarios de Bloomberg. Actualmente, sus hijos, encabezados por Alejandro Baillères Gual, llevan las riendas de su imperio.
La embarcación fue una de las múltiples propiedades que pasó a manos de sus hijos. Él Reina Maya IV tiene un valor estimado de $175 millones y, según superyateventilador “Es el yate encarnación del lujo en alta mar”. Un representante del Grupo Bal ha dicho a EL PAÍS que no puede confirmar que el yate sea de la familia ya que es propiedad personal, y no de empresas del grupo.
En agosto de 2018, el Reina Maya IV fue noticia cuando el cuerpo de Sinead McNamara, una modelo australiana de 20 años, fue encontrado muerto. Él heraldo griegoun periódico para la comunidad griega en Australia, informó que las autoridades declararon la causa de la muerte como suicidio.
Los Baillères tienen un poder económico significativo en México y operan en varios sectores. En el área financiera, son propietarios de Valores Mexicanos Casa de Bolsa y Operadora, conocidos como Valmex, así como del fondo de retiro Grupo Profuturo. También son dueños de la aseguradora GNP Seguros y de una de las instituciones educativas más influyentes: el Instituto Tecnológico Autónomo de México, conocido por sus siglas ITAM. La universidad de élite, fundada por los Baillères y famosa por su visión empresarial, es una de las más reconocidas del país. Sus egresados han ocupado cargos gubernamentales y son importantes empresarios dentro y fuera de México.
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