
El secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, se ha mostrado optimista sobre las variables económicas de México hacia el final del sexenio. Pese a que el espectro de una posible recesión en EE.UU. aún ronda los pronósticos de los principales búnkeres financieros, el funcionario federal garantizó el apoyo a la endeudada Pemex, resaltó la atracción de inversión al país por la deslocalización y descartó la necesidad de una próxima reforma fiscal: “Sería una muy mala idea que cualquier gobierno, como hemos visto en otros casos, iniciara un período con una subida de impuestos”, declaró este martes en la Junta Nacional de Directores Regionales de BBVA celebrada este martes en la capital del país.
Ramírez de la O reconoció que la condición de paraestatal de Pemex impide que el Estado la incluya como deuda soberana. “Estamos sujetos al régimen legal que distingue a las empresas productivas del Estado como entidades separadas, para efectos de la deuda, por lo que son responsables de las amortizaciones de su deuda, pero en el caso de Pemex, como en el caso de cualquier otra empresa estratégica para el país, Hacienda siempre estará dispuesta a ayudar en los casos en que haya falta de liquidez o una situación que obligue a la empresa, de tal forma que no la obligue a quedar mal con los compromisos de pago”, aseguró ante un concurrido foro de banqueros Al cierre del primer trimestre, los pasivos de la paraestatal superaban los 107.000 millones de dólares.
Ramírez de la O reconoció que, en efecto, este año el precio del crudo mexicano está por debajo del precio presupuestado, pero comentó que tanto Hacienda como Pemex tienen coberturas para corregir esta diferencia. “Pensamos que las coberturas van a estar cubriendo la mayor parte de la diferencia, pero claro, en el corto plazo se observa una desviación del precio presupuestado con respecto al precio de mercado”, aseveró. Actualmente, la mezcla mexicana se cotiza en 64 dólares por barril, por debajo de los 68.7 dólares fijados por el Tesoro en sus Criterios de Política Económica para este año.

El funcionario federal no ha perdido la oportunidad ante la unión financiera de presumir el atractivo de 13.000 millones de dólares en inversión por el fenómeno de la deslocalización mejor conocido como Nearshoring De este desembolso, más del 50% corresponde a proyectos de montaje y autopartes. “Estos anuncios subestiman el potencial, ya sea porque muchos planes no se han anunciado y están en marcha o porque los anuncios preliminares no incluyen todo el potencial que las empresas están considerando”, dijo.
En la misma línea de proyectos prioritarios en la última milla de este Gobierno, el secretario de Hacienda aseguró que en las próximas semanas se cerrará la adquisición de las 13 centrales eléctricas que han comprado a la española Iberdrola. “Luego habrá un período en el que la empresa (Iberdrola) mantiene la operación mientras la CFE hace sus gestiones”, comentó. El convenio suscrito entre la Administración federal y la empresa prevé el pago de un interés del 3,6% anual hasta el cierre de la operación.
La compra de estos activos fue pactada en 6.000 millones de dólares y con esta adquisición, la empresa eléctrica estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE) pasará del 39,6% al 55,5% de la generación eléctrica del país, lo que significa liderazgo en el mercado nacional. matriz energética, uno de los principales objetivos del Gobierno de López Obrador.
BBVA alerta sobre incertidumbre política y regulatoria en México
México enfrentará una paradoja en los próximos 12 meses. Según el análisis de BBVA, el país enfrentará incertidumbre política y regulatoria durante este período, al mismo tiempo que un momento de auge por la atracción de empresas por el fenómeno de la deslocalización o Nearshoring El presidente del Consejo de Administración de BBVA México, Jaime Serra Puche, identificó como principales desafíos internos mantener la estabilidad económica y promover la deslocalización. “Creo que es muy probable que se pueda llegar al final del sexenio con estabilidad, y por eso las decisiones de inversión responderán mucho más al efecto de largo plazo que al efecto financiero de corto plazo”, pronosticó. .
Con más de 28 millones de clientes en el país, México se ha convertido en una pieza clave de la institución financiera. “México es un país con un enorme potencial y una altísima capacidad para aprovechar las oportunidades que surgen del nuevo orden mundial y la creciente regionalización”, dijo Carlos Torres Vila, presidente de la entidad financiera. Para el año 2024, anticipó, extenderán su plan de inversiones en el país a más de 63.000 millones de pesos.
Suscríbete aquí hacia Boletin informativo de EL PAÍS México y recibe toda la información clave de la actualidad de este país